Una posible apertura del recinto Bahía de Guantánamo fue la que anunció el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, luego de haber firmado el proyecto de Ley “Laken Riley”, que tiene como objetivo retener cerca de 30 mil migrantes que se encuentran en situación irregular.
La resolución se dio a conocer en una ceremonia desde la Casa Blanca, como su primer proyecto de ley como presidente de EE.UU. donde confirmó que la base naval de Guantánamo, ubicada en Cuba, se usará para “contener a los peores criminales irregulares que amenazan al pueblo estadounidense”.
El proyecto de Ley “Laken Riley”, lleva como nombre el de una joven de 22 años que fue asesinada el año pasado por Jose Antonio Ibarra, un inmigrante de nacionalidad venezolana. La ley permitirá a las autoridades deportar a los inmigrantes acusados, aun cuando no hayan sido condenados por delitos específicos.
El Congreso ha asignado fondos para detener hasta 41 mil personas, una cifra alta que el equipo de Trump considera insuficiente tomando en consideración que buscan llevar a cabo la mayor deportación masiva en la historia de Estados Unidos.
La base de Guantánamo ya se ha utilizado con este fin previamente, de hecho, se utilizó como un centro de detención de migrantes irregulares entre los años 1980 y 1990, periodo en que fueron enviados cientos de ciudadanos haitianos.